viernes, 2 de marzo de 2012

La peligrosa idea de Darwin (y II)

Continúo mi penitencia cuaresmal con los videos del documental de la BBC sobre la influencia de Darwin en el mundo moderno.

En el capítulo anterior vimos como Nietszche y Marx, entre otros, hicieron interpretaciones torcidas de las teorías de Darwin. Este capítulo se centra en las consecuencias que tuvieron en la sociedad dichas torceduras.

Sinceramente, no entiendo aún cuál es el punto de iluminación al que mi amigo pretende hacerme llegar. Supongo que lo descubriré hasta que vea el capítulo tercero.

Doble rasero

Totalmente de acuerdo con el presentador cuando dice que las ideas de Darwin fueron manipuladas para justificar la esclavitud, el imperialismo, la eugenesia y el racismo. Sin embargo se les olvida decir a nuestros amigos de la BBC que Darwin también fue manipulado para ser el campeón de los ateos, cosa que nunca fue, como hemos comentado en el primer post de esta serie.

Empero, no podemos dejar de hacer notar que si se interpreta a Darwin en el sentido de que la humanidad "no tiene nada de especial" y es igual a los animales en todo, nada tiene que sorprendernos el que cualquier comportamiento depredador quede justificado (explicado mejor dicho, ya que a nadie se le ocurre "justificar" a las hienas o a los lobos). Después de todo, eso es lo que vemos de forma constante en el mundo animal: la viuda negra devora a su consorte sin el menor remordimiento después de copular, las hormigas obreras trabajan sin cesar hasta morir de cansancio por su reina, las orcas y otros animales matan por diversión.

Es curioso que la BBC se horrorice de la eugenesia y apoye el aborto, ya que los argumentos que se suelen dar para defender ambos suelen ser muy parecidos:decir que un niño debe ser abortado porque no va a ser amado y se convertirá en un delincuente no parece muy distinto que decir que no debe nacer porque trasmitiría su debilidad a las siguientes generaciones. Del mismo modo que la Gestapo multaba a los médicos que se oponían a las esterilizaciones, en nuestros días se los obliga a realizar abortos.

Darwin y los derechos humanos. ¿Perdón?

De la perplejidad (por lo sensato, cosa rara en la BBC) ante la parte del documental en la que se hace ver que el genocidio nazi tuvo como fundamento una teoría científica y no una idea religiosa (y les faltó hablar del comunismo), paso a la carcajada abierta al ver el patético intento de "redención" de Darwin. Según Andrew Marr, la Declaración Universal de los Derechos Humanos está basada... ¡en las ideas de Darwin! Por Dios, jamás había escuchado una idea tan peregrina.

Los derechos humanos tienen raíces históricas que deben rastrearse mucho más atrás que el siglo XIX (la época de Darwin). No es casual que la idea de derechos humanos surja en países occidentales, de raíces cristianas, ya que en efecto está basada en el cristianismo y en la cultura clásica: el único fundamento verdaderamente sólido para tales derechos es la idea de que todos los hombres tienen un padre común: Dios, y por lo tanto son hermanos. El que pertenezcamos a la misma especie biológica no quita ni agrega nada. Hoy por hoy los musulmanes y los chinos saben perfectamente que pueden aparearse con un francés o una cristiana, y no por eso son precisamente modélicos en el respeto a los derechos humanos.

Si Darwin se horrorizó de la esclavitud que vio en Bahía no fue porque aquello contradijera su teoría de la struggle for life (más bien sería lo contrario), sino porque era un occidental de cultura judeo-cristiana, a fin de cuentas.

Los científicos no "descubrieron" que los africanos pertencen a la misma especie que los alemanes después de la segunda guerra mundial. Los nazis tampoco dijeron que los judíos no fueran humanos. Precisamente porque sabían que eran humanos sabían que podían "contaminar" la raza aria mediante el apareamiento.

Mucho antes que Darwin hubo quien afirmó la unidad de la especie humana, por ejemplo el papa Pablo III, que en la encíclica Sublimis Deus, proclamada el 2 de junio de 1537, decía respecto a los indígenas americanos:
"declaramos que estos indios, así como todos los pueblos que la cristiandad podrá encontrar en el futuro, no deben ser privados de su libertad y de sus bienes -sin que valgan objeciones en contra-, aunque no sean cristianos, y que, al contrario, deben ser dejados en pleno gozo de su libertad y de sus bienes"
Para san Pablo "ya no hay judío ni griego; ni esclavo ni libre; ni hombre ni mujer, ya que todos ustedes son uno en Cristo Jesús" (Gálatas 3, 28). Solo una ignorancia supina o una mala fe maquiavélica pueden atribuir a Darwin los derechos humanos, como si estos hubieran surgido milagrosamente por generación espontánea cuando terminó la segunda guerra mundial y apareció la ONU en escena. Seguimos atribuyendo a Darwin cosas que no dijo y tomándolo como bandera de causas que nada tienen que ver con sus teorías.

Hablando de judíos, los problemas hereditarios que estos padecen se deben a que practican la endogamia (se creen el único pueblo elegido y evitan mezclarse con los demás pueblos).  Si lograron resolver algunos de sus problemas en este aspecto gracias a los avances de la genética se lo deben más al sacerdote católico Gregorio Mendel que al agnóstico Darwin.  Pero hasta en esto la BBC muestra su cariz tendencioso.

El dilema de la igualdad: creencias contradictorias

Cuando se está empeñado en seguir la senda del pensamiento políticamente correcto hasta sus últimas consecuencias (como suelen hacerlo la BBC y mi amigo) es inevitable quedar atrapado en callejones sin salida, como es bien patente en el presente documental.

Al afirmar que no somos superiores en nada al resto de los animales, y que "todo lo que somos está en los genes" negamos la libertad humana, con lo cual le damos la razón a la interpretación nietzcheana de Darwin: si no somos libres tampoco podemos ser responsables de nuestros actos, y por lo tanto la moral se vuelve absurda.

Por otra parte, si la moral no puede ser fundamentada, entonces no hay motivo para exigir que el fuerte respete al débil. La igualdad sería una estratagema de los débiles para adormecer a los fuertes y evitar que estos ejerzan su legítimo derecho a la dominación, como decía Nietzsche.  Después de todo, en eso consiste la struggle for life, ¿no?

Como todas estas conclusiones pueden llegar a ser muy impopulares, el presentador de la BBC nos pide que hagamos caso omiso del darwinismo en lo que respecta a las relaciones humanas y que sigamos creyendo (sin ningún fundamento) en la igualdad en los seres humanos. Nos viene a decir que el darwinismo debe ser usado solamente para crear polémicas artificiales con las religiones, no para definir cómo deben ser las relaciones entre los seres humanos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario