Nosotros sodomizaremos a vuestros hijos, emblemas de vuestra débil masculinidad, de vuestros bajos sueños y vulgares mentiras. Nosotros los seduciremos en sus escuelas, en sus dormitorios, en sus gimnasios, en sus vestuarios, en sus zonas deportivas, en sus seminarios, en sus grupos de jóvenes, en los cuartos de baño de los teatros y cines, en los dormitorios de sus ejércitos, en sus paradas de carreteras, en todos sus clubes de hombres, en los congresos, en cualquier sitio donde hombres estén junto a hombres. Vuestros hijos se harán nuestros siervos y lucharán por nosotros. Vuestros hijos serán reconstruidos, según nuestra imagen. Vendrán, para desearnos, y adorarnos.(El adoctrinamiento homosexual como paradigma de la “Educación para la ciudadanía” es elemento prioritario del adoctrinamiento de nuestros hijos en una sociedad aberrosexual.)
Mujer, tú gritas por la libertad. Tú dices que no estás ni estarás nunca satisfecha con hombres. Ellos no te hacen feliz. Nosotros, conocedores del rostro masculino, de la psique masculina, te llevaremos por encima de él. Mujer, tú dices que deseas vivir con cualquier otro excepto con el hombre. Hazlo. Nosotros daremos a tu hombre placeres que nunca ha conocido, porque nosotros somos hombres también, y solo un hombre sabe como de verdad dar placer a otro hombre. Solo un hombre puede entender la profundidad y sentimiento, la mente y cuerpo, de otro hombre. (La alianza entre el homosexualismo político y el feminismo radical tiene como objetivo destruir la relación entre los sexos.)
Todas las leyes que prohíben el homosexualismo serán revocadas. En cambio, se creará legislación que inculque las relaciones sexuales entre los hombres. Todos los homosexuales deben estar de pie juntos como hermanos; debemos estar unidos artística, filosófica, social, política y económicamente. Triunfaremos solo cuando presentemos una cara común al vicioso enemigo heterosexual. Si tú heterosexual, desafías y gritas contra la unión de homosexuales, contra el encanto especial de nosotros, te apuñalaremos en tu cobarde corazón, profanaremos tu endeble y muerto cuerpo. (No hay más que ver cómo se estigmatiza con el epíteto de "homófobo" a todo aquel que presente resistencia al proyecto homosexualista de deconstrucción social para agredirlo, ridiculizarlo y encarcelarlo.)
Escribiremos poemas de amor entre hombres; organizaremos juegos en los cuales el hombre abiertamente acaricia al hombre; haremos películas sobre el amor entre los hombres heroicos que sustituirán el barato, superficial, sentimental, insípido, juvenil, encaprichamiento heterosexual que domina en este momento las pantallas de sus cines. Esculpiremos las estatuas de jóvenes hermosos, de los atletas valientes que serán colocados en sus parques, en sus plazas. Los museos del mundo estarán llenos sólo con las pinturas de chavales llenos de gracia, desnudos. (Véanse las corrientes del cine desde la pornografía “light” de "El secreto de la montaña" hasta el cine de Almodóvar. ¿Alguien piensa que si Almodóvar no estuviera apoyado por grupos homosexualistas recibiría tantos premios?)
Nuestros escritores y artistas harán el amor con hombres de moda y famosos, tendremos éxito porque somos expertos en crear modas. Eliminaremos elementos heterosexuales por el uso de los dispositivos de engaño y burla, dispositivos para los que somos expertos en el empleo. Desenmascararemos a los homosexuales poderosos que hacen la mascarada como heterosexuales. Usted se asombrará y asustará cuando se encuentre que sus presidentes y sus hijos, sus industriales, sus senadores, sus alcaldes, sus generales, sus atletas, sus estrellas de cine, sus personalidades de televisión, sus líderes cívicos, sus sacerdotes no son el fortín de la familia, burguesa y heterosexual que usted asumió. Estamos por todas partes; hemos infiltrado sus filas. Tenga cuidado cuando usted habla de homosexuales porque estamos entre ustedes; podemos sentarnos junto a su mesa; podemos dormir en la misma cama. (Premonición del auge de la prensa rosa a finales de los noventa y su capacidad de difamar y crear bulos sobre cualquiera.)
No habrá compromisos. No somos ninguna débil clase media. Somos altamente inteligentes, somos la aristocracia natural de la raza humana. Los aristócratas de mente acerada como el sable nunca se conforman con poco. Aquellos que se opongan serán exiliados. (Ingenuidad de quienes piensan que el homosexualismo político sólo busca el cese de la discriminación, la cual en muchos países occidentales hace mucho que ha sido trocada por la exaltación sin disimulos.)
Levantaremos ejércitos enormes privados, como Mishima hizo, para derrotarlos. Conquistaremos el mundo porque tendremos guerreros inspirados por el amor homosexual, como eran los antiguos griegos. La familia, el lugar donde nace la mentira, la traición, la mediocridad, la hipocresía y la violencia será suprimida. El grupo familiar, que sólo enfanga la imaginación y limita el libre albedrío, debe ser eliminado. Muchachos perfectos serán concebidos y cultivados en el laboratorio genético. Ellos serán vinculados juntos en la educación comunal, en el control y la instrucción homosexual. (Premonición de la cantidad de leyes que se han dispuesto para debilitar, marginar o destruir a la familia, entre ellas la más significativa es la del pseudo “matrimonio” homosexual. La única razón por la que Marcelo Ebrard fue nombrado "mejor alcalde del mundo" es su apoyo descarado a la agenda del lobby homosexual.)
La Iglesia y las religiones que nos condenan serán eliminadas. Nuestros únicos dioses son hermosos jóvenes. Nos adherimos a un culto de belleza, moralidad y estética. Todo lo que es feo, vulgar y banal será aniquilado. (No hay sino que ver el odio hacia el cristianismo que se refleja en las manifestaciones y actos orquestados por el lobby gay)
Estaremos libres de las convenciones de la clase media heterosexual, somos libres de vivir nuestras vidas según los dictados de la imaginación pura. Para nosotros demasiado no es bastante. (¿Imaginación pura? Lo único que han hecho es reproducir miméticamente a la sociedad que tanto odian.)
La sociedad exquisita que surgirá será gobernada por una élite comprendida de poetas alegres. Una de las exigencias principales para una posición de poder en la nueva sociedad de homoerotismo será la indulgencia en la pasión griega. Cualquier hombre contaminado con la lujuria heterosexual automáticamente será excluido de una posición de influencia. Todos los machos que insistan tontamente en lo heterosexual serán llevados ante la justicia homosexual y se harán hombres invisibles. (Leyes que marcan cualquier elemento que cuestione lo mas mínimo la dominación del pensamiento homosexualista como algo ilegal. El término despectivo e irrespetuoso de “homofobia” es usado para atacar a cualquier persona o institución que critique o exprese su opinión contraria a los intereses de ese grupo de presión política.)
Volveremos a escribir la historia, la historia completa y rebajada de su mentira heterosexual. Retrataremos el homosexualismo de los grandes líderes y los pensadores que han formado el mundo. Demostraremos que en el homosexualismo inteligencia e imaginación están inextricablemente unidas, y que el homosexualismo es una exigencia para la nobleza verdadera, la belleza verdadera en un hombre. (La reescritura de la historia en clave homosexual funciona desde los años 60, pero se ha acelerado desde los 90. En la actualidad, todo personaje histórico desde Julio César hasta Burt Lancaster, pasando por Goya, Miguel Ángel… son “descubiertos” como homosexuales. Eso sí, sin ninguna prueba ni elemento histórico demostrable. Pero eso no significa que su “historia” pueda ser cuestionada, ya que dicho cuestionamiento conlleva la difamación de “homófobo”.)
Saldremos victoriosos porque estamos abastecidos de combustible con la amargura feroz del oprimido que ha sido forzado a jugar aparentemente papeles secundarios en un mundo heterosexual a lo largo de los años. También somos capaces de encender armas y acudir a las barricadas de la revolución última. Tiembla hetero-cerdo, cuando aparezcamos ante ustedes, sin nuestras máscaras (Mientras tanto siguen apelando al sentimentalismo de la gente y se presentan como las víctimas de una sociedad machista retrógrada.)
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